jueves, 26 de abril de 2018

De tus calles hice mi lugar

 Cuando me preguntaron que era lo que más iba a extrañar sin pensarlo dije El Barrio. Y creo que cuando me pregunten cual es mi lugar en el mundo, mi respuesta sin pensar va a ser "Laprida y Santiago del Estero".
 
 No se ni por donde empezar, se me vienen tantas cosas a la cabeza que podría escribir un libro con todo lo que viví acá adentro!.
 Tanto que acá adentro crecí, acá adentro aprendí, amé, reí, lloré, acá adentro viví!
 Cerrar etapas o ciclos no siempre hace bien, pero este no es el caso.  Creo que ya aprendí y viví todo lo que acá adentro se podía. Una naranja se deja de apretar cuando no tiene más para dar, El 87 ya me dio todo lo que podía darme! y fue muchísimo!
 Tengo tanto por agradecerte!. Tantas historias, tantas anécdotas, tantas charlas, tantas cosas compartidas. 
 Formaste amistades, enemistades. Amores y desamores, alguna que otra traición. Fuiste amigo, novio, compañero, psicólogo. Fuiste contención, fuiste risas, llantos, enojos, locuras. Fuiste mucho para mi y para todos los que alguna vez se sentaron en tu escalón a compartir una charla, una cerveza,  un pucho, una coca o un mate.
 Tengo tanto por agradecerte! Compartiendo en tu puerta conocí a las mejores personas que podía conocer. Bajo tu puerta hice los mejores amigos que podría tener. Bajo tu puerta conocí amores, algunos efímeros otros que duraron lo que tenían que durar.
 Tengo tanto por agradecerte! Atrás de tu mostrador aprendí que por más que uno no este se humor siempre hay que ser respetuoso, siempre un "Hola, gracias  y hasta luego". Atrás de tu mostrador aprendí que el que esta del otro lado tiene una historia en sus espaldas que hay que respetar!
 Tengo tanto por agradecerte! Que me va a llevar otros 15 años decirte Gracias, Gracias por la familia, Gracias por los amigos, Gracias por los amores, Gracias por las risas, alegrías, llantos, tristezas. En fin gracias por darme la chance de crecer!
 Ahora después de escribir esto me doy cuenta de que estaba equivocado. No voy a extrañar el barrio. Te voy a extrañar a vos querido Kiosquito!
Gracias "El 87"!

 
  Y cuando me pregunten cual es mi lugar en el mundo, mi respuesta sin pensar va a ser "Laprida y Santiago del Estero".
 
P/D: terminé llorando! ☺

domingo, 11 de febrero de 2018

Hoy vos no corres

 Cuando el destino atenta contra nosotros no hay mucho que podamos hacer. Ese domingo me di cuenta que hagamos lo que hagamos es imposible vencerlo.
 Esto que me pasó no arrancó el domingo sino el lunes anterior. Para que entiendan ese domingo era "domingo de carrera", la primera del año para mi. Imagínense la ansiedad que venía acumulando después de dos meses de sólo entrenamiento.
 Ese lunes, faltando sólo seis días para la largada, me decidí a pagar la inscripción. Pero por cosas del día y vaya uno a saber que otros motivos no me hice tiempo para imprimir el cupón de pago. "Lo dejo para mañana" me dije, y acá es donde entra El Destino a jugar conmigo.
 Esa tarde, calurosa tarde de lunes, mientra me encontraba haciendo nada en mi trabajo recibo un mensaje de Facebook. Era de Mariano y en pocas palabras me decia que me había hecho acreedor de una inscripción a la carrera. Gané! Gané el concurso!. Todo cerraba, El Destino fue quien no quiso se yo tenga tiempo para imprimir el cupón de pago para la inscripción de "mi primer carrera del año".
  La semana transcurrió muy lenta, trabajo, entrenamientos, trabajo y alguna cena compartida pero nada mas que eso. El sabado era el día impuesto por la organización para retirar el Kit de competición (remera, número y chip, no mucho más) hasta acá todo muy normal, pero en mi había sensaciones de que algo iba a pasar.. así que traté de hacer todo bien y meticulosamente pensado. Preparar la ropa, zapatillas, reloj, hidratación, alimentación y sobre todo descanso. Y así se fue el sábado, con la misma sensación de "algo va a pasar".
 Y el gran día llegó, domingo 6:05 y sin darle tiempo al despertador la lluvia, la indeseada lluvia me despertó. En otra ocación no me hubiera molestado pero esta vez tenía que viajar 25 kilómetros en moto! Hacía dos meses no llovía y justo hoy va a llover! Y acá vuelve El Destino, pero esta vez para jugar en contra, como diciendo "hoy vos no corres".
 Mientras preparaba un muy nutritivo desayuno, no vaya a ser que me quede sin "nafta" a mitad de carrera!, pensaba que opciones tenía. Me quedaba una sola, y me dije "el NO ya lo tenes", y lo llamé a Escobar. Para mi sorpresa me dijo que si. Es más, me prestó su auto. Listo a correr!
 Y como si fuera una de las mejores novelas de suspenso de Stephen King, (mediocre maestro de secundaria viaja al pasada para salvar a J.F.K pero el pasado se pone en su contra. "El pasado se defiende, no quiere ser cambiado").
 Bueno! Volviendo, ese domingo entendí que el detino siempre atenta contra nosotros, a favor (como aquel lunes) o en contra. Crean o no había algo que no quería que yo corriera ese día. Y ese algo era El Destino, porque a sólo 10 kilómetros de llegar el auto que Escobar (mi viejo) me prestó, me dejó tirado al costado de la ruta y con los pies embarrados como si hubiera corrido esa carrera. Per no! El Destino, ese destino que yo hice propio, quiso que yo ese domingo no corriera y terminara con la remera puesta tomando mates en el sillón de mi casa!
                                                   Fin.

Perdón me olvidaba. Dejó de llover y salió el Sol!